lunes, 27 de junio de 2011

Ramón Vierna

Diario de abordo. Palma – Cabrera –Andraitx – Palma 87 millas.
Ramón de Vierna Pita.

1 de mayo 11,45. Salimos de Palma para Cabrera con una faja de rizos. Le damos una pasada al KEKA-Ray fondeado fuera del puerto. Seguidamente izamos foque trinqueta, NE. Metemos tangón y velozmente cambia el viento al NW a un largo.
El barco va algo pesado, debe ser el miedo a morirnos de hambre el que ha hecho rebosar las bodegas de ricas viandas.
13,05. Dejamos Cabo Blanco con bastante marejada por la popa. La cocina imposible, así que comemos huevos duro y pan mojado en tintorro. Capitán en la caña y Alvah de fotógrafo ambulante por la cubierta.
16,05. Entramos en Cabrera, arriamos velas, metemos motor para atracar de punta, largamos ancla por la popa, ah, demasiado pronto, el cabo no llega empalmamos. Al dar atrás se enreda el cabo en la hélice. Toda la culpa del menda que escribe. Mucos tacos y adjetivos cariñosos a mi Padre. Sacamos ancla de respeto y con el chinchorro y ayuda de la tripulación del Samoa damos y atracamos.
Ahora la solución fría, al agua, cortar cabo liado y a comer. Comemos tortilla y pierna de cordero con tintorro. Capitán y Alvah saltan a tierra. De vuelta invasión de todas las tripulaciones, muchos Pepes, Ferrer, Tomás, Mut y Kilo.
Se consume media bodega.
Cenamos sopita y a dormir.

2 de mayo. Tomamos café menos Alvah que duerme y ronca como nadie. Intentamos arrancar motor, ni hablar, manos a la manivela, uno detrás de otros, dejamos: riñones, hígado y estómago. El puñetero no quiere, es de construcción Británica y no entiende las maldiciones en castellano.
11,30. Salimos de Cabrera con levante suave. Rumbo Andraitx con foque, trinqueta y mayor a tope de palo. Alvah sigue durmiendo.
19,00. El Toro por el través de estribor.
21,00. Enfrente del Cám. de Mar.
22,00. Montamos la Mola de Andraitx casi sin viento. Arriamos foque y ceñimos muchas bordadas. El barco navega bien con poco viento.
24,00. Montamos la primera farola y unos metros antes de la segunda encallamos en fango. Un pescador con su chinchorro nos ayuda; largando ancla por la proa nos zafamos de un tirón. Entramos en el puerto de Andraitx.

3 de mayo. Después de una noche con interpretación de un dúo melódico a base de ronquidos entre Capitán y Alvah, por fin llegó el café.
Pasamos todo el día atracados.

4 de mayo 10,45. Salimos de puerto. Izamos foque, trinqueta y mayor. Poco viento del NW. Montamos tangón a la altura del Toro.
11,10. Hay hambre. Pan con tomate y unas copas de vino Río Viejo. Mientras cocina prepara, un poquito de ajo arriero y almejas salsa.
14,00. Por el través Cala Figueras. Capitán baja a preparar café. Mientras cambiamos tangón de banda continuando en empopada. Copa y siesta. Palma.

Diario de Abordo. Marta Guirao

21 Junio 2010.
Desayunos para Alberto y para mí.
Nuestras cuatro bellezas comienzan a desperezar.
La primera en salir es Leticia, nuestra belleza rubia, aunque Alberto y yo la llamamos morena.
Es natural.
La genética la ha beneficiado sin duda alguna, posee una hermosura salvaje con la melena desgreñada pese a sus binóculos poco atractivos.
Marta es la segunda; sin duda más Murcia su guapura, espléndida (sin ofender) frutalmente propaga ( como dijo el poeta )
Carlota ( nuestra rubia favorita) amanece pletórica, con esa sonrisa que le caracteriza ante cualquier pregunta que le realizas. Su atractivo radica en sus formas redondas, su cabellera negra y larga y en su modo de sonreír, mientras te mira pensando ( tú que dijo me dices )
Y por fin ( Anitaaaa. Grito desde cubierta )
Aparece la más exótica de nuestras bellezas. Ana, es como Platero, suave y de algodón.
Sin ningún tipo de dudas los ojos de mayor esplendor en nuestro barco, la mejor de las sonrisas y esa vocecita que la hace deliciosa.
Nuestras niñas se hacen el desayuno. ¡Caramba, qué bien me comen!.
12.00 Salimos de la Cala. Largamos amarra por proa y a navegar.
El viento es suave, no más de 12 nudos, NEE.
Izamos mayor y desplegamos Génova.
Ponemos la proa a los freus.
Primera lección de navegación a vela para las niñas.
Carlota al Génova (no sabe muy bien donde está )
Marta a la rueda, gobernando el barco. (Me queda claro que esto es aprendizaje y no genética.)
Ana despistada.
Leticia haciendo pruebas de aerodinámica. ( Primero un moyo y luego la melena al viento)
El viento rola al norte. Rumbo ha salinas.
Marta y yo vamos a la proa para preparar la maniobra de tangón.
Ana a la rueda, ella y la rueda se hacen una.
Maniobra de tangón lista. Marta y yo en la proa. Leticia toma el mando ( por suerte Alberto anda cerca ) Nos dejamos caer a sota, abrimos ángulo de viento. Coloca Marta el tangón. Navegamos en popa con orejas de asno o burro.
Marta y yo sobrevivimos pese a Leticia.
La navegación en popa y con tangón da algún problema que otro.
Pasamos por babor la Isla Redonda. Quitamos tangón y trasluchamos.
Viento de E. Flojo.
Ponemos rumbo a Las Salinas. Sur de Ibiza.
Entre todas arrían mayor y enrollan el Génova.
Nos acercamos lentamente a motor. Volvemos a tomar una boya por la popa.
15,30 Alberto arría la neumática de apoyo.
Comienza la hora de la comida. Huevos revueltos que saben a gloria. Hechos con mucho amor por Anita y yo.
Nuestras aventureras cogen la neumática y a golpe de galeote se van a la playa. Menudo desbarajuste de remos que nos llevan. Carlota se lleva la neumática con su remar indio siempre hacia su lado, sin que Ana pueda evitarlo.
Alberto y yo tomamos café y después siesta merecida.
17.00 Desperezamos. Una copita de ron marinero.
En la lontananza se ve a las aventureras regresar. Dos vienen en la neumática y las otras dos nadando detrás. Está claro que lo suyo no es el remo.
18.30 Desamarramos e izamos mayor.
Viento suave del E. Navegamos de través.
Leticia patronea. Las demás a descansar.
20.30 Entramos en Marina Formentera. Atraque perfecto según Marta.
Las chicas se quedan recogiendo mientras Alberto y yo damos la entrada en capitanía.
Duchas para nuestras harapientas niñas que a pesar de su aspecto nos parecen guapísimas. Orden de estar a las 22.00 listas y en perfecto estado de revista.
Alberto y yo nos duchamos y vamos de paseo, visita a la zona de los patrones. Rencuentro con Nacho. Casi un año sin vernos y con Oscarín que sigue llevando su vieja cafetera por el mediterráneo. No puedo olvidarme de Sigfrido. Que buenos momentos hemos pasado juntos desde nuestra infancia. Es balear de familia de marinos como yo. Su abuelo y el mío navegaron juntos y uno de sus tíos fue compañero de mi tío Alfonso en Marín. El, al igual que yo no hemos tenido tendencia a lo militar pero sí al mar y sobre todo a la competición en vela.
Con la segunda cerveza en la mano, aferrada como si se nos fuera a escapar, comenzamos a rememorar años pasados. Nos conocimos en el Mar Menor, en un campeonato de España de cadete en Los Alcáceres.
Sigfri, comienza a poner acento murciano, recordando aquellos años.
Los demás nos llaman la atención y sin quererlo, ya está la tercera cerveza en nuestra mano.
Alberto me recuerda que hemos quedado con las chicas y que debemos ir a cenar.
Nos reunimos todos en un bar gallego. Hemos invitado a Nacho, ya que el resto tenían que ir a sus barcos.
La cena es divertida, gracias a Nacho, Marta y Leticia, que se enconan en una guerra dialéctica con Nacho. (Qué tipo tan peculiar. Divertido para dos días )
Por supuesto Martita y Leti lo barren del mapa.
Comenzamos con la ronda de copas. (Cómo me beben la Leti y la sobrina) Bueno una noche es una noche. Así que fumaremos la mejor hierba de las Isla.
El momento es divertido. Me destornillo de risa con las teorías de Nacho, las contestaciones de Marta y Leticia y las caras de Ana, Carlota y Alberto.
Bien, comenzamos a ser una tripulación. Hay miradas de Ana para Carlota, de Leticia para Alberto y de Marta para mi.
Momento “Argamenon” para mi Agamenón. Líder de la guerra contra Troya.
Un meteorito pasó sobre nuestras cabezas.
Desde ese momento algunos las perdieron.
4.30 A dormir.

22 Junio 2010
9.30 Amanecemos Alberto y Yo.
Recuento a las chicas. (Están todas)
Paseito por la Sabina, saludos y buenos días para los madrugadores de la mar.
Nos sentamos a desayunas: zumo, tostadas con tomate y jamón, yogur y un tazón de café con leche.
Comentamos la noche de ayer, aún entre risotadas.
Aparición de Nacho. Sigue flipao con las chicas.
11.00 Nos ponemos en marcha para alquilar algún vehículo que nos permita movernos por la Isla.
Hay que revisar el problema eléctrico, seguro que es el cargador de baterías ya que las baterías solo cargan a motor y no a 220V.
Regresamos al barco y nos ponemos manos a la obra.
13.30 Decisión del capitán. Todo el mundo en pié.
Les damos un tiempo para que se despejen y se asen.
Segunda gran decisión: Hoy, tortilla de patatas con ensalada murciana, todo el mundo está por la labor.
Nuestras niñas se ponen a ello, cogen los utensilios y a pelar patatas, es un momento divertido, alegre y ameno.
Todo el mundo colabora y la comida sale estupenda (hay hambre)
Descansamos y las chicas de van a la playa.
Comienza nuestro calvario particular.
Las chicas se retrasan, esto tenía que ocurrir, tarde o temprano, era cuestión de tiempo que nos abandonaran. Han sacado su “Carpe diem quam minimum crédula postero”
Llegan, miran y otorgan. Solo una pregunta de Marta a la que yo solo afirmo “Si”
Ordenes concisas, es tarde y hay que cenar. Después sus conciencias deberán de decidir y actuar. La mía está muy tranquila.
Alberto, Nacho y yo nos adelantamos. Solo miro y pronuncio: es tarde, nos vemos en el restaurante.
Llegamos. Cervecita para digerir.
Las primeras en aparecer son Martita y Leti. ( Qué listas que son las dos bandidas )
Como es costumbre, Anita y Carlotita a su ritmo pero aparecen.
Fin del condumio.
Ordenes claras y concisas: Mañana todas en el barco.
Copita y paseito por la Sabina antes de merecerse el descanso.

23 Junio 2010
8.00 Despierto. He dormido como un ceporro, como se nota que los días van pasando y uno se acostumbra a los barcos. Es una vida distinta, sobre todo la de los navegantes, los aficionados a esta forma de desplazarse lentamente, sin prisas, sin saber que va a ocurrir en las horas posteriores.Hay que apreciar los dones que nos da la naturaleza para poder vivir de esta manera, saber que el sol está para todos y nadie puede hacerlos pagar por él (seguro que Iberdrola y Endesa tienen planes ) Que el viento es nuestro mejor amigo si lo sabemos tratar y que la mar es siempre respeto ya que da y quita a su antojo.
Intento contar a las niñas. Imposible no están.
Marta ha dejado una nota.
8.30 Despereza Alberto.
Desayuno a bordo, charla mañanera y planes para el día.
Cogemos el vehículo terrestre y no vamos a San Adrián.
Compra. Cafetito. Tabaco. Baterías nuevas
Orden y arranchado antes del aperitivo.
Desmontamos las baterías y colocamos las nuevas. Trabajo realizado eso es igual a merecido aperitivo.
Entra deslumbrante Leticia, nos da las buenas nuevas y con voz inocente dice “ vengo a ponerme el bikini, las demás irán llegando, ¿ a que hora volvemos ?
Contestación fría por mi parte “ Habrá que comer y ponernos rumbo a Ibiza”
El rebaño comienza a reunirse.
Que casualidad, Leticia se presenta voluntaria para la comida. Como funciona esa cabecita.
Recuento, todos a bordo, largamos amarras y rumbo a Ibiza.
18.15 Nos es propicio el viento térmico de la zona para realizar esta corta travesía.
Izamos mayor y Génova. Punta de motor y en rumbo.
El resto del día apenas existió para ellas, ya que la noche debió ser agotadora.
Marta sale a cubierta y se queda dormitando.
Alberto y yo hablamos de todo un poco, lo divino y lo humano.
Ibiza ante nuestros ojos.
Junto con Cartagena y los puertos de Menorca, Porto Colón y Porto Cristo en Palma lo más espectacular de la geografía marítima del estado español.
Primero flanqueado por los dados y las pequeñas islas y por último el castillo e isla Grossa con el faro de Botafoch, flanquean una dársena natural inexpugnable.
Amarre en el Club Náutico de Eivissa.
Ibiza, nuestras niñas resucitan, todas aparecen en la cubierta irradiando felicidad, belleza y hormonas.
Marta además de los atributos anteriormente descritos, irradia calor, ya que su siesta en cubierta ha transformado su piel blanca en encarnada.
Tramites, cervecitas, arranchado, duchas y a cenar.
Pasarela pirata para desembarcar, todas salen encantadas, con menos esfuerzo del que pensábamos, hasta Carlotita se ha hecho una experta, con tacones, con chanclas y descalza, Domina el equilibrio.
Hamburguesas para cenar. Nos agrada el sitio que ha elegido Alberto.
Paseito por el casco antiguo de Eivissa.
Damos un beso de buenas noches a nuestras chicas y Alberto y yo regresamos al barco. Copita y a dormir.

24 junio 2010.
8.00 Amanecemos Alberto y yo.
Cuento a las niñas. “Pufff” están las cuatro.
Decidimos para no molestarlas, desayunar en tierra e ir a dar un paseo.
10.30 Hacemos la compra necesaria y regresamos al barco.
Alberto toma la decisión de desamarrar y ponernos rumbo a Illetes.
Marta asoma la cabeza por la cabina y nos saluda.
Dejamos Ibiza.
12.15 Comienzan a desperezar nuestras bellezas.
Alberto decide fondear en Espalmador.
Ana y Carlota se apuntan voluntarias para hacer la comida.
Leticia recibe sus primeras clases con Alberto de cómo navegar en una neumática.
La cara de Leti es un poema, se le transforma el rostro, le entra de pronto la responsabilidad del patrón ( las vidas de la tripulación depende de ella.)
Leticia: seria, responsable y circunspecta toma el mando, Marta arranca el motor, Carlota y Ana se ríen. En esa tesitura se aventuran a ir a la playa.
Alberto y yo quedamos expectantes
Tomamos un aperitivo.
Con grata sorpresa Carlota y Ana vuelven para hacer la comida una realidad.
Organizamos todo lo necesario para comer mientras Anita y Carlotita preparan con amor las viandas.
Baño, copas y siesta merecida.
Alberto desembarca a las chicas en la playa. ( Igual que en Troya, se masca la tragedia)
Ratito de baño y esparcimiento.
Alberto va en busca de las niñas para cenar.
Pasa el tiempo y no diviso la neumática. Nadie aparece en la lontananza.
Imagino que mis niñas han sido atacadas por su “Carpe Diem”
Aparece Alberto.
Cenamos.
Se va haciendo tarde para zarpar mañana sin tripulación.
Comienza una confusión de llamadas preguntando por el tiempo, el parte metéreologico y las chicas. Menudo chubasco se ha montado en quince minutos.
Cogemos la neumática y vamos a la playa.
Las hemos encontrado, ya respiro, enciendo un pitillo y nos ponemos en marcha.
Todos a dormir, mañana zarpamos rumbo a la península.
Mejor ningún comentario más en el día de hoy.

26 Junio 2010
5.00 Nos levantamos Alberto y yo para comenzar las maniobras de desfondeo y poner rumbo a Alicante.
Izamos mayor y con motor comenzamos a navegar. Viento del NE. Flojo.
Preparo el desayuno y vuelvo a dormir. Alberto hará la primera guardia.
7.00 Suena el despertador. Arriba.
Saludo a Alberto y preparo algo de comer para los dos. Alberto entra a descansar.
NE. Génova y mayor portando. Punta de motor.
Las Pitiüses van quedando atrás en otra nueva travesía. Siempre recuerdo la primera vez que vine a estas islas. Navegamos desde Santiago de La Ribera en un Puma 23 que tenía Guillermo Beltri padre. La embarcación disponía de un motor fueraborda 9,9 CV de cola larga que servía para entrar o salir de puerto. Entonces solo se navegaba a vela, dependías de los diferentes juegos de velas que tenía la embarcación. Este pumita iba bien provisto y además de una segunda mayor de capa, tenía dos foques, un génova 110, un atrapa brisas y dos spis. Todo ello hacía que la navegación fuera más rápida.
Pese a la buena equitación y las buenas manos de toda la tripulación, eran los caprichos del sempiterno Eolo el que hacía posible o no, la navegación a vela.
En un barco de aquellas características, uno creía ver el tridente de Neptuno entre las olas espumeantes de blanco y si miraba al cielo le parecía percibir la silueta de unos labios rubí soplando siempre en nuestra contra.
No creo que cualquier tiempo pasado fue mejor:
“…Recuerde el alma dormida
Avive el seso y despierte
Cómo se pasa la vida
Cómo se viene la muerte
Tan callando.
……………………….. Cómo a nuestro parecer cualquier tiempo pasado fue mejor.
No recuerdo el poema de Juan Ramón Jiménez en el que habla del mañana, siempre esperanzador, pero seguro que el futuro es siempre mejor aunque a los que nos hacemos mayores nos da miedo.
Es curioso que cada milla que uno se hace más viejo, comienza a temer lo que nunca pensó o temió y a romper con los “tabúes” y supersticiones que uno ha vivido.
Ya no me da temor el mar y sus olas cuando voy solo, ni las profundidades de este “Mare Nostrum” Ni sus seres fantásticos que causan espanto. Ni pánico las sirenas que embaucaron a Odiseo. Ni los fuertes vientos que crean los cabos, como Atlantes de piedra.
Ahora quiero dejarme ir con el viento y que las olas de azúcar nos mezan a todos por igual. Los dormidos y los que estamos en vela.
9.00. NE. Suave 10 á 11 nudos. Ra.110º
Alberto toma la guardia.
Nos viene bien a los dos comer algo.
A descansar. Vuelvo a recontar a mis niñas. Todas.
11.00. Arriba.
El viento ha bajado, se ve la silueta de las montañas Alicantinas.
12.00 Todo el mundo en pié. Entro en la cabina de las chicas y las despierto, ya es buena hora para que se empiecen a airearse y desayunen algo.
La ola de aleta es algo incomoda.
Nuestra travesía va llegando a su fin.
Antes de acabar quiero pensar con esperanza infinita que algo ha cambiado en ellas, que estas 238 millas recorridas no han sido vanas, que han obtenido una experiencia vital.
21 Junio 2010.
Desayunos para Alberto y para mí.
Nuestras cuatro bellezas comienzan a desperezar.
La primera en salir es Leticia, nuestra belleza rubia, aunque Alberto y yo la llamamos morena.
Es natural.
La genética la ha beneficiado sin duda alguna, posee una hermosura salvaje con la melena desgreñada pese a sus binóculos poco atractivos.
Marta es la segunda; sin duda más Murcia su guapura, espléndida (sin ofender) frutalmente propaga ( como dijo el poeta )
Carlota ( nuestra rubia favorita) amanece pletórica, con esa sonrisa que le caracteriza ante cualquier pregunta que le realizas. Su atractivo radica en sus formas redondas, su cabellera negra y larga y en su modo de sonreír, mientras te mira pensando ( tú que dijo me dices )
Y por fin ( Anitaaaa. Grito desde cubierta )
Aparece la más exótica de nuestras bellezas. Ana, es como Platero, suave y de algodón.
Sin ningún tipo de dudas los ojos de mayor esplendor en nuestro barco, la mejor de las sonrisas y esa vocecita que la hace deliciosa.
Nuestras niñas se hacen el desayuno. ¡Caramba, qué bien me comen!.
12.00 Salimos de la Cala. Largamos amarra por proa y a navegar.
El viento es suave, no más de 12 nudos, NEE.
Izamos mayor y desplegamos Génova.
Ponemos la proa a los freus.
Primera lección de navegación a vela para las niñas.
Carlota al Génova (no sabe muy bien donde está )
Marta a la rueda, gobernando el barco. (Me queda claro que esto es aprendizaje y no genética.)
Ana despistada.
Leticia haciendo pruebas de aerodinámica. ( Primero un moyo y luego la melena al viento)
El viento rola al norte. Rumbo ha salinas.
Marta y yo vamos a la proa para preparar la maniobra de tangón.
Ana a la rueda, ella y la rueda se hacen una.
Maniobra de tangón lista. Marta y yo en la proa. Leticia toma el mando ( por suerte Alberto anda cerca ) Nos dejamos caer a sota, abrimos ángulo de viento. Coloca Marta el tangón. Navegamos en popa con orejas de asno o burro.
Marta y yo sobrevivimos pese a Leticia.
La navegación en popa y con tangón da algún problema que otro.
Pasamos por babor la Isla Redonda. Quitamos tangón y trasluchamos.
Viento de E. Flojo.
Ponemos rumbo a Las Salinas. Sur de Ibiza.
Entre todas arrían mayor y enrollan el Génova.
Nos acercamos lentamente a motor. Volvemos a tomar una boya por la popa.
15,30 Alberto arría la neumática de apoyo.
Comienza la hora de la comida. Huevos revueltos que saben a gloria. Hechos con mucho amor por Anita y yo.
Nuestras aventureras cogen la neumática y a golpe de galeote se van a la playa. Menudo desbarajuste de remos que nos llevan. Carlota se lleva la neumática con su remar indio siempre hacia su lado, sin que Ana pueda evitarlo.
Alberto y yo tomamos café y después siesta merecida.
17.00 Desperezamos. Una copita de ron marinero.
En la lontananza se ve a las aventureras regresar. Dos vienen en la neumática y las otras dos nadando detrás. Está claro que lo suyo no es el remo.
18.30 Desamarramos e izamos mayor.
Viento suave del E. Navegamos de través.
Leticia patronea. Las demás a descansar.
20.30 Entramos en Marina Formentera. Atraque perfecto según Marta.
Las chicas se quedan recogiendo mientras Alberto y yo damos la entrada en capitanía.
Duchas para nuestras harapientas niñas que a pesar de su aspecto nos parecen guapísimas. Orden de estar a las 22.00 listas y en perfecto estado de revista.
Alberto y yo nos duchamos y vamos de paseo, visita a la zona de los patrones. Rencuentro con Nacho. Casi un año sin vernos y con Oscarín que sigue llevando su vieja cafetera por el mediterráneo. No puedo olvidarme de Sigfrido. Que buenos momentos hemos pasado juntos desde nuestra infancia. Es balear de familia de marinos como yo. Su abuelo y el mío navegaron juntos y uno de sus tíos fue compañero de mi tío Alfonso en Marín. El, al igual que yo no hemos tenido tendencia a lo militar pero sí al mar y sobre todo a la competición en vela.
Con la segunda cerveza en la mano, aferrada como si se nos fuera a escapar, comenzamos a rememorar años pasados. Nos conocimos en el Mar Menor, en un campeonato de España de cadete en Los Alcáceres.
Sigfri, comienza a poner acento murciano, recordando aquellos años.
Los demás nos llaman la atención y sin quererlo, ya está la tercera cerveza en nuestra mano.
Alberto me recuerda que hemos quedado con las chicas y que debemos ir a cenar.
Nos reunimos todos en un bar gallego. Hemos invitado a Nacho, ya que el resto tenían que ir a sus barcos.
La cena es divertida, gracias a Nacho, Marta y Leticia, que se enconan en una guerra dialéctica con Nacho. (Qué tipo tan peculiar. Divertido para dos días )
Por supuesto Martita y Leti lo barren del mapa.
Comenzamos con la ronda de copas. (Cómo me beben la Leti y la sobrina) Bueno una noche es una noche. Así que fumaremos la mejor hierba de las Isla.
El momento es divertido. Me destornillo de risa con las teorías de Nacho, las contestaciones de Marta y Leticia y las caras de Ana, Carlota y Alberto.
Bien, comenzamos a ser una tripulación. Hay miradas de Ana para Carlota, de Leticia para Alberto y de Marta para mi.
Momento “Argamenon” para mi Agamenón. Líder de la guerra contra Troya.
Un meteorito pasó sobre nuestras cabezas.
Desde ese momento algunos las perdieron.
4.30 A dormir.












22 Junio 2010
9.30 Amanecemos Alberto y Yo.
Recuento a las chicas. (Están todas)
Paseito por la Sabina, saludos y buenos días para los madrugadores de la mar.
Nos sentamos a desayunas: zumo, tostadas con tomate y jamón, yogur y un tazón de café con leche.
Comentamos la noche de ayer, aún entre risotadas.
Aparición de Nacho. Sigue flipao con las chicas.
11.00 Nos ponemos en marcha para alquilar algún vehículo que nos permita movernos por la Isla.
Hay que revisar el problema eléctrico, seguro que es el cargador de baterías ya que las baterías solo cargan a motor y no a 220V.
Regresamos al barco y nos ponemos manos a la obra.
13.30 Decisión del capitán. Todo el mundo en pié.
Les damos un tiempo para que se despejen y se asen.
Segunda gran decisión: Hoy, tortilla de patatas con ensalada murciana, todo el mundo está por la labor.
Nuestras niñas se ponen a ello, cogen los utensilios y a pelar patatas, es un momento divertido, alegre y ameno.
Todo el mundo colabora y la comida sale estupenda (hay hambre)
Descansamos y las chicas de van a la playa.
Comienza nuestro calvario particular.
Las chicas se retrasan, esto tenía que ocurrir, tarde o temprano, era cuestión de tiempo que nos abandonaran. Han sacado su “Carpe diem quam minimum crédula postero”
Llegan, miran y otorgan. Solo una pregunta de Marta a la que yo solo afirmo “Si”
Ordenes concisas, es tarde y hay que cenar. Después sus conciencias deberán de decidir y actuar. La mía está muy tranquila.
Alberto, Nacho y yo nos adelantamos. Solo miro y pronuncio: es tarde, nos vemos en el restaurante.
Llegamos. Cervecita para digerir.
Las primeras en aparecer son Martita y Leti. ( Qué listas que son las dos bandidas )
Como es costumbre, Anita y Carlotita a su ritmo pero aparecen.
Fin del condumio.
Ordenes claras y concisas: Mañana todas en el barco.
Copita y paseito por la Sabina antes de merecerse el descanso.















23 Junio 2010
8.00 Despierto. He dormido como un ceporro, como se nota que los días van pasando y uno se acostumbra a los barcos. Es una vida distinta, sobre todo la de los navegantes, los aficionados a esta forma de desplazarse lentamente, sin prisas, sin saber que va a ocurrir en las horas posteriores.Hay que apreciar los dones que nos da la naturaleza para poder vivir de esta manera, saber que el sol está para todos y nadie puede hacerlos pagar por él (seguro que Iberdrola y Endesa tienen planes ) Que el viento es nuestro mejor amigo si lo sabemos tratar y que la mar es siempre respeto ya que da y quita a su antojo.
Intento contar a las niñas. Imposible no están.
Marta ha dejado una nota.
8.30 Despereza Alberto.
Desayuno a bordo, charla mañanera y planes para el día.
Cogemos el vehículo terrestre y no vamos a San Adrián.
Compra. Cafetito. Tabaco. Baterías nuevas
Orden y arranchado antes del aperitivo.
Desmontamos las baterías y colocamos las nuevas. Trabajo realizado eso es igual a merecido aperitivo.
Entra deslumbrante Leticia, nos da las buenas nuevas y con voz inocente dice “ vengo a ponerme el bikini, las demás irán llegando, ¿ a que hora volvemos ?
Contestación fría por mi parte “ Habrá que comer y ponernos rumbo a Ibiza”
El rebaño comienza a reunirse.
Que casualidad, Leticia se presenta voluntaria para la comida. Como funciona esa cabecita.
Recuento, todos a bordo, largamos amarras y rumbo a Ibiza.
18.15 Nos es propicio el viento térmico de la zona para realizar esta corta travesía.
Izamos mayor y Génova. Punta de motor y en rumbo.
El resto del día apenas existió para ellas, ya que la noche debió ser agotadora.
Marta sale a cubierta y se queda dormitando.
Alberto y yo hablamos de todo un poco, lo divino y lo humano.
Ibiza ante nuestros ojos.
Junto con Cartagena y los puertos de Menorca, Porto Colón y Porto Cristo en Palma lo más espectacular de la geografía marítima del estado español.
Primero flanqueado por los dados y las pequeñas islas y por último el castillo e isla Grossa con el faro de Botafoch, flanquean una dársena natural inexpugnable.
Amarre en el Club Náutico de Eivissa.
Ibiza, nuestras niñas resucitan, todas aparecen en la cubierta irradiando felicidad, belleza y hormonas.
Marta además de los atributos anteriormente descritos, irradia calor, ya que su siesta en cubierta ha transformado su piel blanca en encarnada.
Tramites, cervecitas, arranchado, duchas y a cenar.
Pasarela pirata para desembarcar, todas salen encantadas, con menos esfuerzo del que pensábamos, hasta Carlotita se ha hecho una experta, con tacones, con chanclas y descalza, Domina el equilibrio.
Hamburguesas para cenar. Nos agrada el sitio que ha elegido Alberto.
Paseito por el casco antiguo de Eivissa.
Damos un beso de buenas noches a nuestras chicas y Alberto y yo regresamos al barco. Copita y a dormir.

24 junio 2010.
8.00 Amanecemos Alberto y yo.
Cuento a las niñas. “Pufff” están las cuatro.
Decidimos para no molestarlas, desayunar en tierra e ir a dar un paseo.
10.30 Hacemos la compra necesaria y regresamos al barco.
Alberto toma la decisión de desamarrar y ponernos rumbo a Illetes.
Marta asoma la cabeza por la cabina y nos saluda.
Dejamos Ibiza.
12.15 Comienzan a desperezar nuestras bellezas.
Alberto decide fondear en Espalmador.
Ana y Carlota se apuntan voluntarias para hacer la comida.
Leticia recibe sus primeras clases con Alberto de cómo navegar en una neumática.
La cara de Leti es un poema, se le transforma el rostro, le entra de pronto la responsabilidad del patrón ( las vidas de la tripulación depende de ella.)
Leticia: seria, responsable y circunspecta toma el mando, Marta arranca el motor, Carlota y Ana se ríen. En esa tesitura se aventuran a ir a la playa.
Alberto y yo quedamos expectantes
Tomamos un aperitivo.
Con grata sorpresa Carlota y Ana vuelven para hacer la comida una realidad.
Organizamos todo lo necesario para comer mientras Anita y Carlotita preparan con amor las viandas.
Baño, copas y siesta merecida.
Alberto desembarca a las chicas en la playa. ( Igual que en Troya, se masca la tragedia)
Ratito de baño y esparcimiento.
Alberto va en busca de las niñas para cenar.
Pasa el tiempo y no diviso la neumática. Nadie aparece en la lontananza.
Imagino que mis niñas han sido atacadas por su “Carpe Diem”
Aparece Alberto.
Cenamos.
Se va haciendo tarde para zarpar mañana sin tripulación.
Comienza una confusión de llamadas preguntando por el tiempo, el parte metéreologico y las chicas. Menudo chubasco se ha montado en quince minutos.
Cogemos la neumática y vamos a la playa.
Las hemos encontrado, ya respiro, enciendo un pitillo y nos ponemos en marcha.
Todos a dormir, mañana zarpamos rumbo a la península.
Mejor ningún comentario más en el día de hoy.













26 Junio 2010
5.00 Nos levantamos Alberto y yo para comenzar las maniobras de desfondeo y poner rumbo a Alicante.
Izamos mayor y con motor comenzamos a navegar. Viento del NE. Flojo.
Preparo el desayuno y vuelvo a dormir. Alberto hará la primera guardia.
7.00 Suena el despertador. Arriba.
Saludo a Alberto y preparo algo de comer para los dos. Alberto entra a descansar.
NE. Génova y mayor portando. Punta de motor.
Las Pitiüses van quedando atrás en otra nueva travesía. Siempre recuerdo la primera vez que vine a estas islas. Navegamos desde Santiago de La Ribera en un Puma 23 que tenía Guillermo Beltri padre. La embarcación disponía de un motor fueraborda 9,9 CV de cola larga que servía para entrar o salir de puerto. Entonces solo se navegaba a vela, dependías de los diferentes juegos de velas que tenía la embarcación. Este pumita iba bien provisto y además de una segunda mayor de capa, tenía dos foques, un génova 110, un atrapa brisas y dos spis. Todo ello hacía que la navegación fuera más rápida.
Pese a la buena equitación y las buenas manos de toda la tripulación, eran los caprichos del sempiterno Eolo el que hacía posible o no, la navegación a vela.
En un barco de aquellas características, uno creía ver el tridente de Neptuno entre las olas espumeantes de blanco y si miraba al cielo le parecía percibir la silueta de unos labios rubí soplando siempre en nuestra contra.
No creo que cualquier tiempo pasado fue mejor:
“…Recuerde el alma dormida
Avive el seso y despierte
Cómo se pasa la vida
Cómo se viene la muerte
Tan callando.
……………………….. Cómo a nuestro parecer cualquier tiempo pasado fue mejor.
No recuerdo el poema de Juan Ramón Jiménez en el que habla del mañana, siempre esperanzador, pero seguro que el futuro es siempre mejor aunque a los que nos hacemos mayores nos da miedo.
Es curioso que cada milla que uno se hace más viejo, comienza a temer lo que nunca pensó o temió y a romper con los “tabúes” y supersticiones que uno ha vivido.
Ya no me da temor el mar y sus olas cuando voy solo, ni las profundidades de este “Mare Nostrum” Ni sus seres fantásticos que causan espanto. Ni pánico las sirenas que embaucaron a Odiseo. Ni los fuertes vientos que crean los cabos, como Atlantes de piedra.
Ahora quiero dejarme ir con el viento y que las olas de azúcar nos mezan a todos por igual. Los dormidos y los que estamos en vela.
9.00. NE. Suave 10 11 nudos. Ra.110º
Alberto toma la guardia.
Nos viene bien a los dos comer algo.
A descansar. Vuelvo a recontar a mis niñas. Todas.
11.00. Arriba.
El viento ha bajado, se ve la silueta de las montañas Alicantinas.
12.00 Todo el mundo en pié. Entro en la cabina de las chicas y las despierto, ya es buena hora para que se empiecen a airearse y desayunen algo.
La ola de aleta es algo incomoda.
Nuestra travesía va llegando a su fin.
Antes de acabar quiero pensar con esperanza infinita que algo ha cambiado en ellas, que estas 238 millas recorridas no han sido vanas, que han obtenido una experiencia vital.
21 Junio 2010.
Desayunos para Alberto y para mí.
Nuestras cuatro bellezas comienzan a desperezar.
La primera en salir es Leticia, nuestra belleza rubia, aunque Alberto y yo la llamamos morena.
Es natural.
La genética la ha beneficiado sin duda alguna, posee una hermosura salvaje con la melena desgreñada pese a sus binóculos poco atractivos.
Marta es la segunda; sin duda más Murcia su guapura, espléndida (sin ofender) frutalmente propaga ( como dijo el poeta )
Carlota ( nuestra rubia favorita) amanece pletórica, con esa sonrisa que le caracteriza ante cualquier pregunta que le realizas. Su atractivo radica en sus formas redondas, su cabellera negra y larga y en su modo de sonreír, mientras te mira pensando ( tú que dijo me dices )
Y por fin ( Anitaaaa. Grito desde cubierta )
Aparece la más exótica de nuestras bellezas. Ana, es como Platero, suave y de algodón.
Sin ningún tipo de dudas los ojos de mayor esplendor en nuestro barco, la mejor de las sonrisas y esa vocecita que la hace deliciosa.
Nuestras niñas se hacen el desayuno. ¡Caramba, qué bien me comen!.
12.00 Salimos de la Cala. Largamos amarra por proa y a navegar.
El viento es suave, no más de 12 nudos, NEE.
Izamos mayor y desplegamos Génova.
Ponemos la proa a los freus.
Primera lección de navegación a vela para las niñas.
Carlota al Génova (no sabe muy bien donde está )
Marta a la rueda, gobernando el barco. (Me queda claro que esto es aprendizaje y no genética.)
Ana despistada.
Leticia haciendo pruebas de aerodinámica. ( Primero un moyo y luego la melena al viento)
El viento rola al norte. Rumbo ha salinas.
Marta y yo vamos a la proa para preparar la maniobra de tangón.
Ana a la rueda, ella y la rueda se hacen una.
Maniobra de tangón lista. Marta y yo en la proa. Leticia toma el mando ( por suerte Alberto anda cerca ) Nos dejamos caer a sota, abrimos ángulo de viento. Coloca Marta el tangón. Navegamos en popa con orejas de asno o burro.
Marta y yo sobrevivimos pese a Leticia.
La navegación en popa y con tangón da algún problema que otro.
Pasamos por babor la Isla Redonda. Quitamos tangón y trasluchamos.
Viento de E. Flojo.
Ponemos rumbo a Las Salinas. Sur de Ibiza.
Entre todas arrían mayor y enrollan el Génova.
Nos acercamos lentamente a motor. Volvemos a tomar una boya por la popa.
15,30 Alberto arría la neumática de apoyo.
Comienza la hora de la comida. Huevos revueltos que saben a gloria. Hechos con mucho amor por Anita y yo.
Nuestras aventureras cogen la neumática y a golpe de galeote se van a la playa. Menudo desbarajuste de remos que nos llevan. Carlota se lleva la neumática con su remar indio siempre hacia su lado, sin que Ana pueda evitarlo.
Alberto y yo tomamos café y después siesta merecida.
17.00 Desperezamos. Una copita de ron marinero.
En la lontananza se ve a las aventureras regresar. Dos vienen en la neumática y las otras dos nadando detrás. Está claro que lo suyo no es el remo.
18.30 Desamarramos e izamos mayor.
Viento suave del E. Navegamos de través.
Leticia patronea. Las demás a descansar.
20.30 Entramos en Marina Formentera. Atraque perfecto según Marta.
Las chicas se quedan recogiendo mientras Alberto y yo damos la entrada en capitanía.
Duchas para nuestras harapientas niñas que a pesar de su aspecto nos parecen guapísimas. Orden de estar a las 22.00 listas y en perfecto estado de revista.
Alberto y yo nos duchamos y vamos de paseo, visita a la zona de los patrones. Rencuentro con Nacho. Casi un año sin vernos y con Oscarín que sigue llevando su vieja cafetera por el mediterráneo. No puedo olvidarme de Sigfrido. Que buenos momentos hemos pasado juntos desde nuestra infancia. Es balear de familia de marinos como yo. Su abuelo y el mío navegaron juntos y uno de sus tíos fue compañero de mi tío Alfonso en Marín. El, al igual que yo no hemos tenido tendencia a lo militar pero sí al mar y sobre todo a la competición en vela.
Con la segunda cerveza en la mano, aferrada como si se nos fuera a escapar, comenzamos a rememorar años pasados. Nos conocimos en el Mar Menor, en un campeonato de España de cadete en Los Alcáceres.
Sigfri, comienza a poner acento murciano, recordando aquellos años.
Los demás nos llaman la atención y sin quererlo, ya está la tercera cerveza en nuestra mano.
Alberto me recuerda que hemos quedado con las chicas y que debemos ir a cenar.
Nos reunimos todos en un bar gallego. Hemos invitado a Nacho, ya que el resto tenían que ir a sus barcos.
La cena es divertida, gracias a Nacho, Marta y Leticia, que se enconan en una guerra dialéctica con Nacho. (Qué tipo tan peculiar. Divertido para dos días )
Por supuesto Martita y Leti lo barren del mapa.
Comenzamos con la ronda de copas. (Cómo me beben la Leti y la sobrina) Bueno una noche es una noche. Así que fumaremos la mejor hierba de las Isla.
El momento es divertido. Me destornillo de risa con las teorías de Nacho, las contestaciones de Marta y Leticia y las caras de Ana, Carlota y Alberto.
Bien, comenzamos a ser una tripulación. Hay miradas de Ana para Carlota, de Leticia para Alberto y de Marta para mi.
Momento “Argamenon” para mi Agamenón. Líder de la guerra contra Troya.
Un meteorito pasó sobre nuestras cabezas.
Desde ese momento algunos las perdieron.
4.30 A dormir.












22 Junio 2010
9.30 Amanecemos Alberto y Yo.
Recuento a las chicas. (Están todas)
Paseito por la Sabina, saludos y buenos días para los madrugadores de la mar.
Nos sentamos a desayunas: zumo, tostadas con tomate y jamón, yogur y un tazón de café con leche.
Comentamos la noche de ayer, aún entre risotadas.
Aparición de Nacho. Sigue flipao con las chicas.
11.00 Nos ponemos en marcha para alquilar algún vehículo que nos permita movernos por la Isla.
Hay que revisar el problema eléctrico, seguro que es el cargador de baterías ya que las baterías solo cargan a motor y no a 220V.
Regresamos al barco y nos ponemos manos a la obra.
13.30 Decisión del capitán. Todo el mundo en pié.
Les damos un tiempo para que se despejen y se asen.
Segunda gran decisión: Hoy, tortilla de patatas con ensalada murciana, todo el mundo está por la labor.
Nuestras niñas se ponen a ello, cogen los utensilios y a pelar patatas, es un momento divertido, alegre y ameno.
Todo el mundo colabora y la comida sale estupenda (hay hambre)
Descansamos y las chicas de van a la playa.
Comienza nuestro calvario particular.
Las chicas se retrasan, esto tenía que ocurrir, tarde o temprano, era cuestión de tiempo que nos abandonaran. Han sacado su “Carpe diem quam minimum crédula postero”
Llegan, miran y otorgan. Solo una pregunta de Marta a la que yo solo afirmo “Si”
Ordenes concisas, es tarde y hay que cenar. Después sus conciencias deberán de decidir y actuar. La mía está muy tranquila.
Alberto, Nacho y yo nos adelantamos. Solo miro y pronuncio: es tarde, nos vemos en el restaurante.
Llegamos. Cervecita para digerir.
Las primeras en aparecer son Martita y Leti. ( Qué listas que son las dos bandidas )
Como es costumbre, Anita y Carlotita a su ritmo pero aparecen.
Fin del condumio.
Ordenes claras y concisas: Mañana todas en el barco.
Copita y paseito por la Sabina antes de merecerse el descanso.















23 Junio 2010
8.00 Despierto. He dormido como un ceporro, como se nota que los días van pasando y uno se acostumbra a los barcos. Es una vida distinta, sobre todo la de los navegantes, los aficionados a esta forma de desplazarse lentamente, sin prisas, sin saber que va a ocurrir en las horas posteriores.Hay que apreciar los dones que nos da la naturaleza para poder vivir de esta manera, saber que el sol está para todos y nadie puede hacerlos pagar por él (seguro que Iberdrola y Endesa tienen planes ) Que el viento es nuestro mejor amigo si lo sabemos tratar y que la mar es siempre respeto ya que da y quita a su antojo.
Intento contar a las niñas. Imposible no están.
Marta ha dejado una nota.
8.30 Despereza Alberto.
Desayuno a bordo, charla mañanera y planes para el día.
Cogemos el vehículo terrestre y no vamos a San Adrián.
Compra. Cafetito. Tabaco. Baterías nuevas
Orden y arranchado antes del aperitivo.
Desmontamos las baterías y colocamos las nuevas. Trabajo realizado eso es igual a merecido aperitivo.
Entra deslumbrante Leticia, nos da las buenas nuevas y con voz inocente dice “ vengo a ponerme el bikini, las demás irán llegando, ¿ a que hora volvemos ?
Contestación fría por mi parte “ Habrá que comer y ponernos rumbo a Ibiza”
El rebaño comienza a reunirse.
Que casualidad, Leticia se presenta voluntaria para la comida. Como funciona esa cabecita.
Recuento, todos a bordo, largamos amarras y rumbo a Ibiza.
18.15 Nos es propicio el viento térmico de la zona para realizar esta corta travesía.
Izamos mayor y Génova. Punta de motor y en rumbo.
El resto del día apenas existió para ellas, ya que la noche debió ser agotadora.
Marta sale a cubierta y se queda dormitando.
Alberto y yo hablamos de todo un poco, lo divino y lo humano.
Ibiza ante nuestros ojos.
Junto con Cartagena y los puertos de Menorca, Porto Colón y Porto Cristo en Palma lo más espectacular de la geografía marítima del estado español.
Primero flanqueado por los dados y las pequeñas islas y por último el castillo e isla Grossa con el faro de Botafoch, flanquean una dársena natural inexpugnable.
Amarre en el Club Náutico de Eivissa.
Ibiza, nuestras niñas resucitan, todas aparecen en la cubierta irradiando felicidad, belleza y hormonas.
Marta además de los atributos anteriormente descritos, irradia calor, ya que su siesta en cubierta ha transformado su piel blanca en encarnada.
Tramites, cervecitas, arranchado, duchas y a cenar.
Pasarela pirata para desembarcar, todas salen encantadas, con menos esfuerzo del que pensábamos, hasta Carlotita se ha hecho una experta, con tacones, con chanclas y descalza, Domina el equilibrio.
Hamburguesas para cenar. Nos agrada el sitio que ha elegido Alberto.
Paseito por el casco antiguo de Eivissa.
Damos un beso de buenas noches a nuestras chicas y Alberto y yo regresamos al barco. Copita y a dormir.

24 junio 2010.
8.00 Amanecemos Alberto y yo.
Cuento a las niñas. “Pufff” están las cuatro.
Decidimos para no molestarlas, desayunar en tierra e ir a dar un paseo.
10.30 Hacemos la compra necesaria y regresamos al barco.
Alberto toma la decisión de desamarrar y ponernos rumbo a Illetes.
Marta asoma la cabeza por la cabina y nos saluda.
Dejamos Ibiza.
12.15 Comienzan a desperezar nuestras bellezas.
Alberto decide fondear en Espalmador.
Ana y Carlota se apuntan voluntarias para hacer la comida.
Leticia recibe sus primeras clases con Alberto de cómo navegar en una neumática.
La cara de Leti es un poema, se le transforma el rostro, le entra de pronto la responsabilidad del patrón ( las vidas de la tripulación depende de ella.)
Leticia: seria, responsable y circunspecta toma el mando, Marta arranca el motor, Carlota y Ana se ríen. En esa tesitura se aventuran a ir a la playa.
Alberto y yo quedamos expectantes
Tomamos un aperitivo.
Con grata sorpresa Carlota y Ana vuelven para hacer la comida una realidad.
Organizamos todo lo necesario para comer mientras Anita y Carlotita preparan con amor las viandas.
Baño, copas y siesta merecida.
Alberto desembarca a las chicas en la playa. ( Igual que en Troya, se masca la tragedia)
Ratito de baño y esparcimiento.
Alberto va en busca de las niñas para cenar.
Pasa el tiempo y no diviso la neumática. Nadie aparece en la lontananza.
Imagino que mis niñas han sido atacadas por su “Carpe Diem”
Aparece Alberto.
Cenamos.
Se va haciendo tarde para zarpar mañana sin tripulación.
Comienza una confusión de llamadas preguntando por el tiempo, el parte metéreologico y las chicas. Menudo chubasco se ha montado en quince minutos.
Cogemos la neumática y vamos a la playa.
Las hemos encontrado, ya respiro, enciendo un pitillo y nos ponemos en marcha.
Todos a dormir, mañana zarpamos rumbo a la península.
Mejor ningún comentario más en el día de hoy.













26 Junio 2010
5.00 Nos levantamos Alberto y yo para comenzar las maniobras de desfondeo y poner rumbo a Alicante.
Izamos mayor y con motor comenzamos a navegar. Viento del NE. Flojo.
Preparo el desayuno y vuelvo a dormir. Alberto hará la primera guardia.
7.00 Suena el despertador. Arriba.
Saludo a Alberto y preparo algo de comer para los dos. Alberto entra a descansar.
NE. Génova y mayor portando. Punta de motor.
Las Pitiüses van quedando atrás en otra nueva travesía. Siempre recuerdo la primera vez que vine a estas islas. Navegamos desde Santiago de La Ribera en un Puma 23 que tenía Guillermo Beltri padre. La embarcación disponía de un motor fueraborda 9,9 CV de cola larga que servía para entrar o salir de puerto. Entonces solo se navegaba a vela, dependías de los diferentes juegos de velas que tenía la embarcación. Este pumita iba bien provisto y además de una segunda mayor de capa, tenía dos foques, un génova 110, un atrapa brisas y dos spis. Todo ello hacía que la navegación fuera más rápida.
Pese a la buena equitación y las buenas manos de toda la tripulación, eran los caprichos del sempiterno Eolo el que hacía posible o no, la navegación a vela.
En un barco de aquellas características, uno creía ver el tridente de Neptuno entre las olas espumeantes de blanco y si miraba al cielo le parecía percibir la silueta de unos labios rubí soplando siempre en nuestra contra.
No creo que cualquier tiempo pasado fue mejor:
“…Recuerde el alma dormida
Avive el seso y despierte
Cómo se pasa la vida
Cómo se viene la muerte
Tan callando.
……………………….. Cómo a nuestro parecer cualquier tiempo pasado fue mejor.
No recuerdo el poema de Juan Ramón Jiménez en el que habla del mañana, siempre esperanzador, pero seguro que el futuro es siempre mejor aunque a los que nos hacemos mayores nos da miedo.
Es curioso que cada milla que uno se hace más viejo, comienza a temer lo que nunca pensó o temió y a romper con los “tabúes” y supersticiones que uno ha vivido.
Ya no me da temor el mar y sus olas cuando voy solo, ni las profundidades de este “Mare Nostrum” Ni sus seres fantásticos que causan espanto. Ni pánico las sirenas que embaucaron a Odiseo. Ni los fuertes vientos que crean los cabos, como Atlantes de piedra.
Ahora quiero dejarme ir con el viento y que las olas de azúcar nos mezan a todos por igual. Los dormidos y los que estamos en vela.
9.00. NE. Suave 10 11 nudos. Ra.110º
Alberto toma la guardia.
Nos viene bien a los dos comer algo.
A descansar. Vuelvo a recontar a mis niñas. Todas.
11.00. Arriba.
El viento ha bajado, se ve la silueta de las montañas Alicantinas.
12.00 Todo el mundo en pié. Entro en la cabina de las chicas y las despierto, ya es buena hora para que se empiecen a airearse y desayunen algo.
La ola de aleta es algo incomoda.
Nuestra travesía va llegando a su fin.
Antes de acabar quiero pensar con esperanza infinita que algo ha cambiado en ellas, que estas 238 millas recorridas no han sido vanas, que han obtenido una experiencia vital.
21 Junio 2010.
Desayunos para Alberto y para mí.
Nuestras cuatro bellezas comienzan a desperezar.
La primera en salir es Leticia, nuestra belleza rubia, aunque Alberto y yo la llamamos morena.
Es natural.
La genética la ha beneficiado sin duda alguna, posee una hermosura salvaje con la melena desgreñada pese a sus binóculos poco atractivos.
Marta es la segunda; sin duda más Murcia su guapura, espléndida (sin ofender) frutalmente propaga ( como dijo el poeta )
Carlota ( nuestra rubia favorita) amanece pletórica, con esa sonrisa que le caracteriza ante cualquier pregunta que le realizas. Su atractivo radica en sus formas redondas, su cabellera negra y larga y en su modo de sonreír, mientras te mira pensando ( tú que dijo me dices )
Y por fin ( Anitaaaa. Grito desde cubierta )
Aparece la más exótica de nuestras bellezas. Ana, es como Platero, suave y de algodón.
Sin ningún tipo de dudas los ojos de mayor esplendor en nuestro barco, la mejor de las sonrisas y esa vocecita que la hace deliciosa.
Nuestras niñas se hacen el desayuno. ¡Caramba, qué bien me comen!.
12.00 Salimos de la Cala. Largamos amarra por proa y a navegar.
El viento es suave, no más de 12 nudos, NEE.
Izamos mayor y desplegamos Génova.
Ponemos la proa a los freus.
Primera lección de navegación a vela para las niñas.
Carlota al Génova (no sabe muy bien donde está )
Marta a la rueda, gobernando el barco. (Me queda claro que esto es aprendizaje y no genética.)
Ana despistada.
Leticia haciendo pruebas de aerodinámica. ( Primero un moyo y luego la melena al viento)
El viento rola al norte. Rumbo ha salinas.
Marta y yo vamos a la proa para preparar la maniobra de tangón.
Ana a la rueda, ella y la rueda se hacen una.
Maniobra de tangón lista. Marta y yo en la proa. Leticia toma el mando ( por suerte Alberto anda cerca ) Nos dejamos caer a sota, abrimos ángulo de viento. Coloca Marta el tangón. Navegamos en popa con orejas de asno o burro.
Marta y yo sobrevivimos pese a Leticia.
La navegación en popa y con tangón da algún problema que otro.
Pasamos por babor la Isla Redonda. Quitamos tangón y trasluchamos.
Viento de E. Flojo.
Ponemos rumbo a Las Salinas. Sur de Ibiza.
Entre todas arrían mayor y enrollan el Génova.
Nos acercamos lentamente a motor. Volvemos a tomar una boya por la popa.
15,30 Alberto arría la neumática de apoyo.
Comienza la hora de la comida. Huevos revueltos que saben a gloria. Hechos con mucho amor por Anita y yo.
Nuestras aventureras cogen la neumática y a golpe de galeote se van a la playa. Menudo desbarajuste de remos que nos llevan. Carlota se lleva la neumática con su remar indio siempre hacia su lado, sin que Ana pueda evitarlo.
Alberto y yo tomamos café y después siesta merecida.
17.00 Desperezamos. Una copita de ron marinero.
En la lontananza se ve a las aventureras regresar. Dos vienen en la neumática y las otras dos nadando detrás. Está claro que lo suyo no es el remo.
18.30 Desamarramos e izamos mayor.
Viento suave del E. Navegamos de través.
Leticia patronea. Las demás a descansar.
20.30 Entramos en Marina Formentera. Atraque perfecto según Marta.
Las chicas se quedan recogiendo mientras Alberto y yo damos la entrada en capitanía.
Duchas para nuestras harapientas niñas que a pesar de su aspecto nos parecen guapísimas. Orden de estar a las 22.00 listas y en perfecto estado de revista.
Alberto y yo nos duchamos y vamos de paseo, visita a la zona de los patrones. Rencuentro con Nacho. Casi un año sin vernos y con Oscarín que sigue llevando su vieja cafetera por el mediterráneo. No puedo olvidarme de Sigfrido. Que buenos momentos hemos pasado juntos desde nuestra infancia. Es balear de familia de marinos como yo. Su abuelo y el mío navegaron juntos y uno de sus tíos fue compañero de mi tío Alfonso en Marín. El, al igual que yo no hemos tenido tendencia a lo militar pero sí al mar y sobre todo a la competición en vela.
Con la segunda cerveza en la mano, aferrada como si se nos fuera a escapar, comenzamos a rememorar años pasados. Nos conocimos en el Mar Menor, en un campeonato de España de cadete en Los Alcáceres.
Sigfri, comienza a poner acento murciano, recordando aquellos años.
Los demás nos llaman la atención y sin quererlo, ya está la tercera cerveza en nuestra mano.
Alberto me recuerda que hemos quedado con las chicas y que debemos ir a cenar.
Nos reunimos todos en un bar gallego. Hemos invitado a Nacho, ya que el resto tenían que ir a sus barcos.
La cena es divertida, gracias a Nacho, Marta y Leticia, que se enconan en una guerra dialéctica con Nacho. (Qué tipo tan peculiar. Divertido para dos días )
Por supuesto Martita y Leti lo barren del mapa.
Comenzamos con la ronda de copas. (Cómo me beben la Leti y la sobrina) Bueno una noche es una noche. Así que fumaremos la mejor hierba de las Isla.
El momento es divertido. Me destornillo de risa con las teorías de Nacho, las contestaciones de Marta y Leticia y las caras de Ana, Carlota y Alberto.
Bien, comenzamos a ser una tripulación. Hay miradas de Ana para Carlota, de Leticia para Alberto y de Marta para mi.
Momento “Argamenon” para mi Agamenón. Líder de la guerra contra Troya.
Un meteorito pasó sobre nuestras cabezas.
Desde ese momento algunos las perdieron.
4.30 A dormir.












22 Junio 2010
9.30 Amanecemos Alberto y Yo.
Recuento a las chicas. (Están todas)
Paseito por la Sabina, saludos y buenos días para los madrugadores de la mar.
Nos sentamos a desayunas: zumo, tostadas con tomate y jamón, yogur y un tazón de café con leche.
Comentamos la noche de ayer, aún entre risotadas.
Aparición de Nacho. Sigue flipao con las chicas.
11.00 Nos ponemos en marcha para alquilar algún vehículo que nos permita movernos por la Isla.
Hay que revisar el problema eléctrico, seguro que es el cargador de baterías ya que las baterías solo cargan a motor y no a 220V.
Regresamos al barco y nos ponemos manos a la obra.
13.30 Decisión del capitán. Todo el mundo en pié.
Les damos un tiempo para que se despejen y se asen.
Segunda gran decisión: Hoy, tortilla de patatas con ensalada murciana, todo el mundo está por la labor.
Nuestras niñas se ponen a ello, cogen los utensilios y a pelar patatas, es un momento divertido, alegre y ameno.
Todo el mundo colabora y la comida sale estupenda (hay hambre)
Descansamos y las chicas de van a la playa.
Comienza nuestro calvario particular.
Las chicas se retrasan, esto tenía que ocurrir, tarde o temprano, era cuestión de tiempo que nos abandonaran. Han sacado su “Carpe diem quam minimum crédula postero”
Llegan, miran y otorgan. Solo una pregunta de Marta a la que yo solo afirmo “Si”
Ordenes concisas, es tarde y hay que cenar. Después sus conciencias deberán de decidir y actuar. La mía está muy tranquila.
Alberto, Nacho y yo nos adelantamos. Solo miro y pronuncio: es tarde, nos vemos en el restaurante.
Llegamos. Cervecita para digerir.
Las primeras en aparecer son Martita y Leti. ( Qué listas que son las dos bandidas )
Como es costumbre, Anita y Carlotita a su ritmo pero aparecen.
Fin del condumio.
Ordenes claras y concisas: Mañana todas en el barco.
Copita y paseito por la Sabina antes de merecerse el descanso.















23 Junio 2010
8.00 Despierto. He dormido como un ceporro, como se nota que los días van pasando y uno se acostumbra a los barcos. Es una vida distinta, sobre todo la de los navegantes, los aficionados a esta forma de desplazarse lentamente, sin prisas, sin saber que va a ocurrir en las horas posteriores.Hay que apreciar los dones que nos da la naturaleza para poder vivir de esta manera, saber que el sol está para todos y nadie puede hacerlos pagar por él (seguro que Iberdrola y Endesa tienen planes ) Que el viento es nuestro mejor amigo si lo sabemos tratar y que la mar es siempre respeto ya que da y quita a su antojo.
Intento contar a las niñas. Imposible no están.
Marta ha dejado una nota.
8.30 Despereza Alberto.
Desayuno a bordo, charla mañanera y planes para el día.
Cogemos el vehículo terrestre y no vamos a San Adrián.
Compra. Cafetito. Tabaco. Baterías nuevas
Orden y arranchado antes del aperitivo.
Desmontamos las baterías y colocamos las nuevas. Trabajo realizado eso es igual a merecido aperitivo.
Entra deslumbrante Leticia, nos da las buenas nuevas y con voz inocente dice “ vengo a ponerme el bikini, las demás irán llegando, ¿ a que hora volvemos ?
Contestación fría por mi parte “ Habrá que comer y ponernos rumbo a Ibiza”
El rebaño comienza a reunirse.
Que casualidad, Leticia se presenta voluntaria para la comida. Como funciona esa cabecita.
Recuento, todos a bordo, largamos amarras y rumbo a Ibiza.
18.15 Nos es propicio el viento térmico de la zona para realizar esta corta travesía.
Izamos mayor y Génova. Punta de motor y en rumbo.
El resto del día apenas existió para ellas, ya que la noche debió ser agotadora.
Marta sale a cubierta y se queda dormitando.
Alberto y yo hablamos de todo un poco, lo divino y lo humano.
Ibiza ante nuestros ojos.
Junto con Cartagena y los puertos de Menorca, Porto Colón y Porto Cristo en Palma lo más espectacular de la geografía marítima del estado español.
Primero flanqueado por los dados y las pequeñas islas y por último el castillo e isla Grossa con el faro de Botafoch, flanquean una dársena natural inexpugnable.
Amarre en el Club Náutico de Eivissa.
Ibiza, nuestras niñas resucitan, todas aparecen en la cubierta irradiando felicidad, belleza y hormonas.
Marta además de los atributos anteriormente descritos, irradia calor, ya que su siesta en cubierta ha transformado su piel blanca en encarnada.
Tramites, cervecitas, arranchado, duchas y a cenar.
Pasarela pirata para desembarcar, todas salen encantadas, con menos esfuerzo del que pensábamos, hasta Carlotita se ha hecho una experta, con tacones, con chanclas y descalza, Domina el equilibrio.
Hamburguesas para cenar. Nos agrada el sitio que ha elegido Alberto.
Paseito por el casco antiguo de Eivissa.
Damos un beso de buenas noches a nuestras chicas y Alberto y yo regresamos al barco. Copita y a dormir.

24 junio 2010.
8.00 Amanecemos Alberto y yo.
Cuento a las niñas. “Pufff” están las cuatro.
Decidimos para no molestarlas, desayunar en tierra e ir a dar un paseo.
10.30 Hacemos la compra necesaria y regresamos al barco.
Alberto toma la decisión de desamarrar y ponernos rumbo a Illetes.
Marta asoma la cabeza por la cabina y nos saluda.
Dejamos Ibiza.
12.15 Comienzan a desperezar nuestras bellezas.
Alberto decide fondear en Espalmador.
Ana y Carlota se apuntan voluntarias para hacer la comida.
Leticia recibe sus primeras clases con Alberto de cómo navegar en una neumática.
La cara de Leti es un poema, se le transforma el rostro, le entra de pronto la responsabilidad del patrón ( las vidas de la tripulación depende de ella.)
Leticia: seria, responsable y circunspecta toma el mando, Marta arranca el motor, Carlota y Ana se ríen. En esa tesitura se aventuran a ir a la playa.
Alberto y yo quedamos expectantes
Tomamos un aperitivo.
Con grata sorpresa Carlota y Ana vuelven para hacer la comida una realidad.
Organizamos todo lo necesario para comer mientras Anita y Carlotita preparan con amor las viandas.
Baño, copas y siesta merecida.
Alberto desembarca a las chicas en la playa. ( Igual que en Troya, se masca la tragedia)
Ratito de baño y esparcimiento.
Alberto va en busca de las niñas para cenar.
Pasa el tiempo y no diviso la neumática. Nadie aparece en la lontananza.
Imagino que mis niñas han sido atacadas por su “Carpe Diem”
Aparece Alberto.
Cenamos.
Se va haciendo tarde para zarpar mañana sin tripulación.
Comienza una confusión de llamadas preguntando por el tiempo, el parte metéreologico y las chicas. Menudo chubasco se ha montado en quince minutos.
Cogemos la neumática y vamos a la playa.
Las hemos encontrado, ya respiro, enciendo un pitillo y nos ponemos en marcha.
Todos a dormir, mañana zarpamos rumbo a la península.
Mejor ningún comentario más en el día de hoy.













26 Junio 2010
5.00 Nos levantamos Alberto y yo para comenzar las maniobras de desfondeo y poner rumbo a Alicante.
Izamos mayor y con motor comenzamos a navegar. Viento del NE. Flojo.
Preparo el desayuno y vuelvo a dormir. Alberto hará la primera guardia.
7.00 Suena el despertador. Arriba.
Saludo a Alberto y preparo algo de comer para los dos. Alberto entra a descansar.
NE. Génova y mayor portando. Punta de motor.
Las Pitiüses van quedando atrás en otra nueva travesía. Siempre recuerdo la primera vez que vine a estas islas. Navegamos desde Santiago de La Ribera en un Puma 23 que tenía Guillermo Beltri padre. La embarcación disponía de un motor fueraborda 9,9 CV de cola larga que servía para entrar o salir de puerto. Entonces solo se navegaba a vela, dependías de los diferentes juegos de velas que tenía la embarcación. Este pumita iba bien provisto y además de una segunda mayor de capa, tenía dos foques, un génova 110, un atrapa brisas y dos spis. Todo ello hacía que la navegación fuera más rápida.
Pese a la buena equitación y las buenas manos de toda la tripulación, eran los caprichos del sempiterno Eolo el que hacía posible o no, la navegación a vela.
En un barco de aquellas características, uno creía ver el tridente de Neptuno entre las olas espumeantes de blanco y si miraba al cielo le parecía percibir la silueta de unos labios rubí soplando siempre en nuestra contra.
No creo que cualquier tiempo pasado fue mejor:
“…Recuerde el alma dormida
Avive el seso y despierte
Cómo se pasa la vida
Cómo se viene la muerte
Tan callando.
……………………….. Cómo a nuestro parecer cualquier tiempo pasado fue mejor.
No recuerdo el poema de Juan Ramón Jiménez en el que habla del mañana, siempre esperanzador, pero seguro que el futuro es siempre mejor aunque a los que nos hacemos mayores nos da miedo.
Es curioso que cada milla que uno se hace más viejo, comienza a temer lo que nunca pensó o temió y a romper con los “tabúes” y supersticiones que uno ha vivido.
Ya no me da temor el mar y sus olas cuando voy solo, ni las profundidades de este “Mare Nostrum” Ni sus seres fantásticos que causan espanto. Ni pánico las sirenas que embaucaron a Odiseo. Ni los fuertes vientos que crean los cabos, como Atlantes de piedra.
Ahora quiero dejarme ir con el viento y que las olas de azúcar nos mezan a todos por igual. Los dormidos y los que estamos en vela.
9.00. NE. Suave 10 11 nudos. Ra.110º
Alberto toma la guardia.
Nos viene bien a los dos comer algo.
A descansar. Vuelvo a recontar a mis niñas. Todas.
11.00. Arriba.
El viento ha bajado, se ve la silueta de las montañas Alicantinas.
12.00 Todo el mundo en pié. Entro en la cabina de las chicas y las despierto, ya es buena hora para que se empiecen a airearse y desayunen algo.
La ola de aleta es algo incomoda.
Nuestra travesía va llegando a su fin.
Antes de acabar quiero pensar con esperanza infinita que algo ha cambiado en ellas, que estas 238 millas recorridas no han sido vanas, que han obtenido una experiencia vital.

viernes, 10 de junio de 2011

Kayak con Vela Latina Auxiliar o "Sailyak"

Esta es de momento la frikada más grande que he visto en esto de la vela, pero... es muy accesible y supongo que será muy bonito de navegar en condiciones de mar plato.
El Kayak no tiene apenas nada de francobordo y la navegación es prácticamente a ras del mar, la vela latina hace complicado de navegar y requiere cierta pericia para navegar a rumbo pero la verdad es que me resulta super-curioso.

Algo que no descartaría de probar, os dejo un par de videos que he encontrado sobre el tema:





Este concepto Sailyak tiene su claro ejemplo en el siguiente vídeo, en este caso la vela que utiliza es la típica que habréis visto montada en un Optimist, es realmente un trabajo de bricolaje el que se muestra en el vídeo siguiente:




(me encantan los vídeos de hágalo usted mismo)

Espero vuestros comentarios sobre esto, os animáis ha hacer una flotilla de Sailyaks? jejeje